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  • Descubra las mejores prácticas en la gestión del flujo de efectivo en tiempos de grandes riesgos

    Los titulares acerca de una recesión económica inminente como resultado del nuevo coronavirus (COVID-19) son cada vez más graves, esto ha generado que los países suspendan el comercio y la educación para “aplanar la curva”.

    Los economistas informan que el crecimiento económico se desacelerará bruscamente, los niveles de desempleo aumentarán y el crecimiento de las ganancias se volverá negativo. Mientras tanto, los ingresos del gobierno se verán severamente disminuidos. Todo esto generará desafíos para todas las economías del mundo a corto y largo plazo.

    Para la economía, ha sido una salida abrupta de donde se encontraba hace apenas dos meses. Si bien existieron algunos focos rojos, los principales segmentos de la economía, como el mercado laboral, parecían muy fuertes, mientras que las perspectivas de inversión mejoraron luego de una disminución de las tensiones comerciales externas.

    Pero este es un momento interesante para pensar en optimizar los límites de crédito para acelerar el crecimiento. Ahora parece que las consecuencias económicas del coronavirus dominarán cualquier impulso de crecimiento económico que existiera antes del brote.

    Los abruptos cierres de empresas y las medidas sociales extremas adoptadas para frenar el virus han alterado permanentemente las perspectivas de crecimiento y estabilidad a corto y largo plazo. Este impacto tendrá como resultado efectos negativos inmediatos en el mercado laboral, resultados de ingresos y ganancias, estabilidad financiera, funcionamiento y acceso a los mercados crediticios, confianza empresarial y del consumidor y las perspectivas de inversión.

    Gestión de créditos comerciales y cobranza empresarial en medio de un riesgo global sin precedentes

    Es raro observar una perturbación simultánea tanto en la oferta como en la demanda. Sin embargo, la naturaleza abrupta de las interrupciones actuales ha dado a las empresas y hogares menos tiempo para reaccionar y planificar. Ciertas condiciones deberían proporcionar un poco de tranquilidad para un proceso de recuperación, incluido un sistema bancario bien capitalizado con más capacidad de recuperación que durante la crisis financiera mundial de 2008.

    Aun así, enfrentamos un riesgo global sin precedentes a medida que la escala del impacto económico inicial de los cierres de tiendas y el autoaislamiento continúa creciendo. Algunas compañías en determinadas industrias experimentarán problemas de flujo de efectivo más serios porque no han podido registrar ingresos (restaurantes y bares, por ejemplo), y por lo tanto no pueden pagar sus facturas, mucho menos a sus empleados.

    Ahora es el momento para que los equipos de finanzas y crédito sean flexibles y adopten una visión a futuro sobre lo que pueden hacer para administrar mejor el flujo de efectivo durante esta recesión económica:

    • Considere los datos de la cadena de suministro: Los profesionales de crédito están acostumbrados a mirar los datos de crédito de sus clientes para considerar su solvencia, pero ahora es importante considerar también los datos de la cadena de suministro como parte de su evaluación integral de riesgos. No es suficiente conocer la fortaleza financiera de sus clientes, ahora necesita conocer la salud financiera de sus proveedores y de los proveedores de sus proveedores. Si sus clientes dependen de unos pocos proveedores, pueden enfrentar un mayor riesgo si no hay métodos alternativos de producción disponibles. ¿Cuál es su plan B? Como líder global en datos y análisis de decisiones comerciales, CIAL Dun & Bradstreet ofrece soluciones de gestión de riesgos de terceros y soluciones financieras para proporcionar a las empresas una visión integral del riesgo ascendente y descendente.
    • Mantenga la relación con sus clientes: Recuerde, estamos todos juntos en esto. Tenemos que mantener el comercio en marcha, y sostener la flexibilidad del flujo de efectivo en tiempos de crisis puede ser más apropiado que las estrictas medidas contra los que pagan con atrasos. Hable con sus clientes para ayudarlos a comprender que usted también necesita permanecer en el negocio. Si su empresa tiene la capacidad, tal vez pueda renunciar a los cargos por pagos atrasados en cuentas vencidas hasta 90 días para las industrias que se sabe que están en graves dificultades. Ahora podría ser un mejor momento para establecer un plan de pago en cuentas severamente morosas en lugar de colocar una retención de crédito y enviar la cuenta a su agencia de cobros de terceros. Aquí también es donde los datos y puntajes predictivos pueden proporcionar información necesaria para predecir si una empresa puede pagar tarde. También es importante revisar los precios y los márgenes de su empresa para ver qué puede “pagar” para ser flexible. Esto significa una mayor asociación interna a través de las finanzas, las ventas y las operaciones para mantener a todos alineados con el flujo de efectivo proyectado.
    • Realice la gestión continua de su cartera: A medida que hacemos todo lo posible para atender a nuestros clientes durante esta pandemia, comprender la situación financiera de sus clientes le permitirá gestionar mejor su relación con ellos. Configurar alertas para monitorear riesgos crediticios puede ser crucial en este momento, particularmente si los cambios tendrán un impacto material o financiero en su negocio. Es importante que se le notifique el deterioro de los puntajes de crédito y los eventos legales (como demandas y cargos, que pueden indicar una bancarrota en puerta). El monitoreo puede ayudarlo a adelantarse a circunstancias adicionales que pueden requerir un nivel de toma de decisiones y preparación comercial que normalmente se pasarían por alto durante una temporada positiva.
    • Vuelva a lo básico con lo esencial del crédito: Las prácticas fundamentales empleadas durante muchos años vuelven a prevalecer en estos tiempos turbulentos. Si bien contamos con soluciones analíticas automatizadas para ayudar a los equipos de crédito, se trata de un soporte complementario para el análisis crediticio integral. El análisis debe centrarse en los principios básicos de la gestión crediticia: carácter, capacidad, capital, condiciones y garantías. Ciertamente, las condiciones son un enfoque principal, ya que esta variable requiere considerar el impacto económico que enfrentan sus clientes, con variables como su industria, cadena de suministro y ubicación geográfica.

    Si bien el carácter es un concepto subjetivo, es posible que deba adoptar tácticas de cobranza menos agresivas al tratar con aquellos clientes y compañías que considera que tienen un carácter respetuoso.

    Al emplear estos elementos a medida que reevalúa sus políticas de crédito y sus mejores prácticas, los componentes fundamentales lo ayudarán a establecer un proceso integral y diligente para mantener un flujo de efectivo positivo.

    CIAL Dun & Bradstreet puede ayudarle a comprender el riesgo oculto en su cartera de clientes a través de nuestras soluciones para mejorar el rendimiento de su negocio.